El amor ha tenido múltiples nombres a través de la historia.
Entre rostros tristes y templados mientras camino por las calles de Santiago, veo parejas de la mano acurrucándose ante el frio otoñal. Como acto seguido las hojas caen y crujen al pisar. Entremedio del cemento crecen raíces que se acomodan al estresante concreto, tan estructurado y moldeado. La forma en la se impone es una muestra de expresión, algo así como estar disconforme y romper por completo lo impuesto, sobresaliendo con miedo, pero lleno de actitud y belleza.
Dos ramas se abrazan mientras miro la Avenida Pedro de Valdivia, inmensas ramas que alcanzaron a entrelazarse independientes unas de las otras, viendo pasar un desfile de amoríos bajo sus sombras estacionales, en esta década.
Hace un poco mas de frío y el otoño ya casi pasa. Mis dedos ya no entrelazan los tuyos y se sienten vacíos. La nostalgia, es la que me trae recuerdos ... esta vez nos visualizo desde afuera del vehículo y manipulo los recuerdos para poder acariciarte la nuca nuevamente. Tu mano esta estirada exigiendo que mis yemas se deslicen en tus dedos, la brisa se hace tenue y el atardecer luce en frente un arrebol. De fondo suena Bratty - "Quédate", así nos recuerdo.
La niebla entro en la avenida y las personas caminan mas rápido delante de mí, a esta hora todos van de regreso a sus casas, en un tiempo récord para poder disfrutar un poco de vida, después del trabajo. ¿Donde están Romeo y Julieta?, hace rato que ya nos los veo, ni los leo.
El amor de Romeo y Julieta, es uno de esos amores que generan dopamina cuando los escuchas recitando los poemas mas cursis a quienes les quitan los sueños. Es la sensación de mariposas en el estomago volviéndonos incómodos y felices al mismo tiempo. La serotonina que provoca es adictiva, nos vuelve sensibles y sometidos a ella. Así fueron estos amantes atados a un amor imposible y así te vi deseándole. Esforzándote en las mañanas, coincidiendo sus tiempos para que fuera la primera conversación del día, cambiando tus planes, reinventándote.
El semáforo esta en rojo, en mi costado se oye una pareja discutiendo por dinero. Ella luce esbelta con zapatos Versace, que por lo menos hoy no puedo tener en mi repisa, pero puedo admirar desde aquí. Él, un tipo de estatura pequeña, con un Rolex que cubre el total de su muñeca, el cual luce cuando mira la hora.
Podría pensar que esas costumbres de las familias reales por conservar la sangre o proteger sus imperios, arreglando matrimonios, destruyendo sueños y amores reales, se había quedado allí en el pasado. Pero, lo cierto es que los amores faustos están cada vez mas de moda y para mi no son parte de las historias interesantes que quiero recapitular.
Sigo caminando, sigo observando. Ahí estaban, perdidos en las caras de los unos, deseando sus labios, desenredando sus cabellos.
"Soy un fan de construir, no destruyo".
"Viejito, ¿me imaginas por la chacra desnuda, con mi pelo al viento?, ¿Tu me esperarías al final para hacer el amor?...
"Nunca había sentido un amor tan grande".
La Vasopresina es la hormona del compromiso, esta relacionada con la felicidad y la monogamia. Contribuye a mantener relaciones a largo plazo. La tecnología nos convirtió en seres de placeres inmediatos y este tipo de hormonas, a poco no la creamos.
Poco se habla y se oye de amores completos.
El metro esta lleno, es hora punta y me espera un largo camino a casa. Acabo alcanzando un asiento y me reflejo en frente. Recuerdo cuando mencionaste que no se puede dejar de sentir tan rápido, Me pregunto si algunas vez cuestionas lo que sientes, ¿Conoces tus emociones?.
Me caigo del espiral y de pronto ya no volvemos a vernos. Entonces pienso que el amor que he construido dentro de mi requiere Intimidad + Pasión + Compromiso. Las hormonas no me olvidan por mas que prefiera el placer en las noches frías. En esos días donde la vida esta dura y somos vulnerables, la serotonina y oxitocina no son suficientes, para quizás haber llamado a un impulso de tus emociones "amor".
Sin embargo, aunque no sea completo, no deja de ser hermoso y valido. Lo importante es que aprensas a reconocerlo y te preguntes a diario cual es el tipo de amor que quieres tener en tu vida.
-Próxima estación, Universidad Católica... me acordé de la Gabriela, la esoterista que me enseñó a cuestionarlo todo.
El cuerpo.